¡¡¡ Bienvenidos corazones !!!

Deseo que disfrutes del contenido de este espacio, toma con cuidado sus curvas, atiende los silencios, respira profundamente y siente. Ojalá que este trocito de mi mundo nos ayude a acercarnos y así compartir el hilo de la vida. De corazón a corazón, PatMel.

Puede que a veces parezca ausente, pero aunque no veas las palabras mi esencia está allí y mi Ser te recibe con Amor.

Los escritos son de mi autoría y las imágenes propias o prestadas de la red.

22 de abril de 2021

Entraña abierta

























Tus venas abiertas 
corren generosas
regalan cosechas 
de tierra y de mar
Tus brazos al cielo 
resguardan los nidos
que lanzan en trinos
su vuelo vital

Colores y ritmos
sol de mediodía
mareas y luna
brújula celestial

            El hombre acontece
            Ambición e ignorancia
            Abre mil heridas
            Arrebata el alma 
            al tiempo ancestral

            Derramas llantos
            relámpagos de fuego
            Gritas, desesperas
            No te resignas

¿Cómo devolverte el ritmo de vida?
¿Cómo venerarte y volver a empezar?
Pacha Mama, Gaia, Madre Tierra
Regazo infinito, Hogar

Hoy te canto, corazón abierto
Respiro humilde solo a tu compás
La mano extendida
conciencia que emerge
Renacer, Despertar

Convoco a los pueblos
invoco a los dioses
imploro a los hombres...

Retumban tambores
Silencio inmortal

Una luz asoma
Horizonte nuevo
Amor Universal


En Homenaje a la Madre Tierra, 22 de abril 2021
(Inédito) Reservo todos los derechos de autor.
Imagen de la red.

8 de abril de 2021

R es pirar se



Hace nueve años transitaba la rambla de Piriápolis, ciudad balnearia cercana a Montevideo. 
Entonces, las cenizas que se unieron a los naufragios tenían sentido. 

Recuerdo aquel malecón que recogió tantas veces mis pasos menudos mientras la suave brisa agitaba mis coletas. Desde pequeña me cautivó el mar, caprichoso espejo ondulando los colores del universo.

Un lugar  donde el tiempo se detiene, un lugar donde hundirse en los maravillosos atardeceres y practicar mi aterrizaje al igual que Juan Salvador.

Hoy es distinto. Hoy me siento como un ave que, de a ratos, olvida batir sus alas para salir de esta jaula ficticia, para no sucumbir en el abismo.

Hoy comienzo a limpiar mis plumas con esmero.
Hoy estoy afilando mi pico con paciencia para deshacer todos los barrotes y romper alambradas de humo.

Mi vuelo cambiará de rumbo.
Mi destino es respirar entre los sabios brazos de esos gigantes que se alzan al cielo como dioses piadosos, enraizados a la verdad y al latido de la tierra.


PatMel (poema en prosa, inédito)
Todos los derechos Reservados.