Los pájaros huyeron
a cobijarse a otras tierras
Dejaron tras de sí
un vacío infinito
El agapornis pía
junto a su ventana
No se resigna
a esta soledad y abandono
Un cristal infranqueable
le impide volar
No es libre
Juguete del hombre
permanece cautivo
Un mundo desconocido
florece frente a sus pupilas
Impotencia
Desazón
Tristeza
Esclavitud y muerte.
De m poemario No Tengo Nada